Aunque si bien es cierto que la forma de relacionarse con el sexo y la sexualidad de cada persona es algo muy individual, nos tiene que quedar claro que intimidar, exigir o controlar de una forma no consentida la manera como se debe responder a estímulos sexuales puede ser considerado como una forma de violencia sexual.

En una relación de pareja debe prevalecer la confianza y el respeto mutuo, por lo que es importante que dejes claro lo que no estás dispuesta hacer, sin sentirte culpable si no haces algo de lo que te pide, ya que lo único que estás haciendo es respetar tu propia voluntad.

En cuanto a tu petición de poder controlarlo para evitar estas situaciones, tenemos que decir que es importante entender y aceptar que sus comportamientos no dependen de nosotras, a diferencia de la idea con la que se nos educa de que nosotras somos responsables de hacer que el otro cambie.

Aunque nos comentas que no quieres denunciarlo, te explicamos cómo funciona el tema por si cambiase la situación y decidieses hacerlo. Respecto la amenaza de difusión de las fotos íntimas, se reconoce en el sistema jurídico español como un delito, ya que el envío a través de la red (en el ámbito de la pareja) de mensajes de naturaleza sexual sin el consentimiento de la otra parte, conocido popularmente como “sexting”, vulnera la intimidad, el derecho a la propia imagen y la inviolabilidad del domicilio. El delito existe con la falta de consentimiento de una de las partes. Por ello, te aconsejamos que guardes mensajes o pruebas de amenazas por si lo necesitases con posterioridad.

Entendemos el motivo por el que no quieres denunciar, ya que la obligación de tener que dar evidencia o exponer tu vida particular a terceros fomenta la “victimización secundaria” o “doble victimización”, que es la sensación que experimentan algunas mujeres por la falta de empatía, sensibilidad o desinformación del personal que le atiende. Pero tenemos que recalcar que la denuncia, desde un punto de vista legal, es el único mecanismo que activa la mayor parte del apoyo a las víctimas de violencia machista.

Te aconsejamos que busques apoyo de personas próximas que te puedan ayudar, de profesionales de la psicología en servicios especializados en atención a la mujer para poder hablar sobre el tema, o de órganos especializados en temas de violencia. Puedes encontrar más información sobre estos y otros recursos en nuestra web.

– EQUIPO SIEMPREVIVAS