Si estás sufriendo violencia por parte de tu pareja o expareja, es posible que hayas oído hablar de VioGén o del SIAV (en Cataluña). Son sistemas creados para proteger y hacer seguimiento de las mujeres que denuncian violencias machistas, pero hay una realidad que muchas veces se invisibiliza: cuando hay hijos/as a cargo, la violencia suele ser más grave, más constante y mucho más difícil de romper. Por eso es tan importante conocer bien cómo funcionan estos sistemas y cómo te pueden ayudar a proteger tanto tu vida como la de tus hijos/as.

En el año 2007 se puso en marcha en España el Sistema de Seguimiento Integral en los casos de Violencia de Género (VioGén), en cumplimiento de la Ley Orgánica 1/2004. Este sistema se creó para hacer un seguimiento y ofrecer protección a las mujeres que sufren violencias machistas por parte de sus parejas o exparejas.

VioGén es una herramienta que conecta a diferentes instituciones y fuerzas de seguridad, permitiendo hacer un seguimiento de cada caso, evaluar el nivel de riesgo y coordinar medidas de protección adaptadas a cada mujer. Entre esas medidas se incluyen desde órdenes de protección, hasta dispositivos de localización o vigilancia policial en casos graves.

El Estudio Estatal sobre Violencia Machista y Maternidad realizado por el Ministerio de Igualdad el pasado 2024, ya reflejaba una realidad clara: más del 63% de las mujeres que sufren violencia machista tienen hijos/as menores de edad. Y, a finales de enero de 2025, el sistema VioGén tenía registrados 101.254 casos activos de violencia machista en España. De ellos, 52.824 corresponden a mujeres con menores a cargo, lo que supone un aumento del 23,6% respecto al año anterior. Estos datos son alarmantes y reflejan cómo la violencia afecta de forma directa a las madres y también a sus hijos e hijas.

En este 2025, el Ministerio del Interior ha lanzado VioGén II una versión actualizada que pretende corregir muchas de estas deficiencias. Esta nueva versión incorpora un enfoque más integral, evaluando no solo el comportamiento del agresor, sino también la situación vital de la mujer: su red de apoyo, su situación administrativa, económica y familiar. Además, VioGén II mejora la comunicación entre cuerpos policiales y servicios sociales, con el objetivo de ofrecer una protección más adaptada y rápida, especialmente cuando hay hijos/as menores a cargo.

Pese a esta actualización, un reportaje de The New York Times de enero de 2025 ha destapado que VioGén sigue presentando importantes fallos, especialmente en los casos donde las mujeres retiran la denuncia por miedo, dependencia económica o presión familiar. Estos casos suelen salir del radar de protección, lo que genera una sensación de abandono y desprotección.

Es importante aclarar que VioGén no opera en Cataluña de la misma manera que en el resto del Estado. En su lugar, desde 2017 funciona el SIAV (Servei Integral d’Atenció a les Víctimes de Violència Masclista), un sistema propio que depende de la Generalitat. Una de las principales diferencias es que el SIAV permite el acceso sin necesidad de denuncia previa, lo que lo hace más accesible para muchas mujeres que no están preparadas para judicializar su situación. Este acceso directo permite activar medidas de protección inmediatas, a través de Mossos d’Esquadra y servicios sociales.

Sin embargo, a pesar de esta flexibilidad, el SIAV registra cifras muy inferiores a las de VioGén. Según datos de 2024, el SIAV atendió 6.700 mujeres en toda Cataluña, mientras que VioGén contabilizó más de 101.000 casos activos, hasta julio del 2024. Las cifras tan dispares entre ambos sistemas reflejan diferentes enfoques y requisitos de acceso. VioGén solo protege tras denuncia, lo que excluye a muchas mujeres. El SIAV, en cambio, ofrece acceso más amplio, pero no realiza un seguimiento continuado como VioGén. Esta diferencia de enfoque puede explicar por qué las cifras son tan diferentes: muchas mujeres catalanas optan por no denunciar y acceden a recursos a través del SIAV, pero al no tener seguimiento continuado, y no figuran como “activos”.

En Cataluña, puedes llamar al 112 o al Servei d’informació per WhatsApp contra la violència masclista, un whats app gestionado por Mossos d’Esquadra. También puedes acudir directamente a ellos, aunque no hayas decidido denunciar aún. En el resto de España, si decides denunciar, asegúrate de explicar si tienes hijos/as a cargo y cómo la violencia les afecta. Esto puede ser clave para que te asignen una protección adecuada.

Si NO quieres denunciar, busca asesoramiento legal o contacta con asociaciones que estén en tu entorno o a través de la web: www.siempreprevivas.org para saber qué derechos tienes y qué recursos están disponibles.

Y recuerda: la violencia vicaria es violencia machista. Si tu agresor amenaza o manipula a tus hijos/as, es fundamental que lo pongas en conocimiento de los servicios de protección. Si quieres saber más o necesitas ayuda, Siemprevivas está aquí para acompañarte.